La fundación de derechos humanos, Cristosal, detalló este martes que entre enero de 2016 y marzo de 2018, se contabilizaron 675 menores de edad que huyeron de sus hogares por motivos de violencia social. Además, 12,221 menores de edad abandonaron la escuela por supuestas amenazas contra sus familias.
Celia Medrano, directora de Cristosal, explicó que los desplazamientos forzados afectan el desarrollo de la niñez.
El equipo de investigación de Cristosal brinda monitoreo constante a las violaciones en materia de derechos humanos, para brindar información oportuna y certera sobre las causas y efectos de estas sobre las poblaciones vulneradas. Alimentado por datos provenientes de instituciones Estatales, de sociedad civil y de cooperación internacional, sus publicaciones fortalecen la labor de defensa y promoción de los derechos humanos en el Norte de Centroamérica.