En un mundo donde pareciera que migrar es un crimen, y más si
se trata de una “migración ilegal”, es importante poder dar voz a
las personas que se ven forzadas a salir de sus países con la única
esperanza de tener un futuro. No importa si este implica mucho
trabajo o enfrentarse a condiciones muchas veces adversas, al final
y al cabo es la ilusión de poder proveer para sus familias, de escapar
de la pobreza y -en el peor de los casos- de la misma muerte, lo que
les impulsa a dejar todo atrás, incluyendo sus arraigos más fuertes en
una región con una fuerte ausencia del Estado para garantizar aun los
derechos mínimos.
El equipo de investigación de Cristosal brinda monitoreo constante a las violaciones en materia de derechos humanos, para brindar información oportuna y certera sobre las causas y efectos de estas sobre las poblaciones vulneradas. Alimentado por datos provenientes de instituciones Estatales, de sociedad civil y de cooperación internacional, sus publicaciones fortalecen la labor de defensa y promoción de los derechos humanos en el Norte de Centroamérica.